miércoles, 18 de febrero de 2015

La fimosis breve introducción



Hoy os vamos a hablar de un blog muy interesante que he encontrado se llama doctorenlinea. Com , tiene un sinfín de artículos de salud y están redactados por unos buenos profesionales. Nos puede decir cosas que ya pensábamos que sabíamos pero nunca está mal recordarlas, puntualizaré diciendo que podemos encontrarnos con cinco grados de fimosis dependiendo del nivel de severidad, es decir depende de la capacidad que tenga el prepucio de retraerse y este pueda mostrar el glande. 

Hay veces que personas que tienen fimosis fuerzan el prepucio y puede llegar a producirse una parafimosis, la parafimosis es una urgencia médica y puede ser muy peligrosa si se prolonga en el tiempo. Nada más que tengamos los síntomas de fimosis debemos acudir a urgencias, estos son imposibilidad de retraer el glande a su posición de reposo. Al no poder retraerse el prepucio se produce una hinchazón en la parte anterior del glande produciendo el corte del flujo de sangre hacia este, si dura unas cuantas horas se puede llegar a producir necrosis e incluso se puede llegar a perder el pene.
La fimosis es más común en los recién nacidos ya que esta se presenta en el 90% de los casos, pero es algo muy normal que va disminuyendo con el paso de los años, esto es así porque es una función protectora del cuerpo, para prevenir enfermedades en los bebes. De todas formas si esta preocupado siempre puede recurrir a cremas con corticoides para su bebe ya que es el tratamiento más sencillo y menos agresivo, poco a poco el prepucio va a cogiendo elasticidad y a las adherencias balanoprepuciales se van  despegando de la piel. La circuncisión debe ser el último paso sobre todo en niños, ya que con los años la fimosis desaparece. Para los israelis la circuncisión es toda una ceremonia, hay alguna cultura más que forma parte de su tradición, pero la verdad que no es necesario en la actualidad una circuncisión si no se padece de fimosis.

viernes, 13 de febrero de 2015

Alimentos envueltos 2

Es importante para el consumidor tener algunos conocimientos básicos que le permitan evaluar al momento de la compra de un producto las cualidades elementales bajo las cuales fue envasado y conservado el mismo, para garantizarle que reúne las condiciones óptimas para su consumo.
Esto no es sólo aplicable a productos alimenticios, que nos son más sensibles, sino también a cosméticos, de cuidado personal o limpieza.
En principio, lo que observamos como consumidores y nos da nuestro primer impulso de compra es el impacto que el envase produce sobre nosotros, es lo que en marketing se entiende como venta por impulso, y en general se relaciona a aspectos tales como el conocimiento de la marca, el diseño, un logotipo o un color particular que relacionamos con ese artículo, pero esto nos dice nada referente a la cualidades de conservación del producto, asumimos que esto está cubierto y que el producto está adecuadamente envasado.
Obviamente también nos guiamos por el costo del producto, y su relación con la cantidad ofrecida, pero nuevamente, esto tampoco nos habla de las cualidades del envasado.
Si el consumidor presta un poco más de atención, buscará el famoso "consumir preferentemente antes de.....", en este punto comenzamos a tener un indicio de las cualidades de conservación del articulo que deseamos adquirir. Esto es lo que se entiende como el tiempo de conservación del producto desde el momento que el mismo fue envasado hasta que el mismo pierde sus cualidades.
Quien ofrece al mercado productos con fecha de vencimiento tendrá que evaluar correctamente la ecuación costo del envase en función del tiempo que estima que el producto estará expuesto al punto de venta (rotación), de esta forma dimensionará el envase para cubrir adecuadamente este requisito.



Ahora bien, queda claro que ante el mismo producto se podrán ofrecer distintos tiempos de conservación de acuerdo al envase utilizado.
Otro punto interesante a tener en cuenta, pero en general desconocido para quien se acerca a comprar un producto, es cuáles son los factores que influirán sobre la conservación del producto; el más obvio se da en aquellos productos que por conocimiento popular sabemos que deben conservar una cadena de frío, pero existen otros productos que por ejemplo son sensibles a luz y deben ser adecuadamente protegidos, otros que son afectados por el oxígeno, también los hay que son sensibles a la presencia de vapor de agua, o aquellos que pierden su aroma o sabor, claramente es difícil conocer cuales son las cualidades que se deben preservar en cada caso y no es función de quien compra conocerlas, sino simplemente obtener aquello por lo cual paga en las condiciones adecuadas de conservación para su consumo.
Si vemos los envases que se ofrecen sobre el mercado, entenderemos la complejidad frente a la cual nos encontramos y la diversidad de materiales involucrados.
En los días que corren, existe una marcada tendencia a buscar ahorros de costos, y en este punto el envase es uno de los puntos donde se presta la mayor atención debido a que en varios casos su incidencia sobre el costo final es alta. Observemos, a modo de ejemplo, las diversas formas con la que podemos presentar un mismo producto y su relación con los puntos ya comentados:
Veamos como se nos presentan en el mercado los envases de café, en algunos casos lo adquirimos en grano y simplemente fraccionado en una bolsa de papel cerrada con una cinta adhesiva. Pero el mismo producto se presenta en bolsas plásticas perfectamente cerradas. En este caso la diferencia es la conservación del producto en función del tiempo de rotación del mismo en el punto de venta, mientras que quien ofrece el producto envasado cerrado está pensando en una rotación menor, mayor conservación de producto y preservación de aromas, quien ofrece el producto "suelto" no está haciendo estas consideraciones.
Otro tanto sucede con el mismo producto pero molido, entre quien lo envasa al vacío y quien no, por lo general en nuestro mercado, la tendencia, por razones de costos, es no envasar al vacío, en ambos caso tendremos buenos productos, pero uno tendrá mayor tiempo de conservación que el otro.
Existen muchos más ejemplos como el comentado y lo podemos ver a diario, es interesante el ejercicio, cómo consumidores, de interesarnos en estos aspectos que en definitiva hacen a una mejor calidad de vida.